11 Comportamientos en un niño que pueden indicar que tiene autismo
Los niños que padecen autismo no suelen ser cómo los demás. Quizá podamos notarlos distraídos y apartados del resto de personas que los rodean. Pero esto no se debe a que no les agrademos, sino que su trastorno causa que sus habilidades de interacción social y comunicativas sean poco eficientes. Además, hay que recordar que hay diversos grados de afectación de este padecimiento, así que podrás notarlo en algunos con facilidad, pero en otros no tanto.
Por eso, en Bella y Genial queremos compartirte algunas señales que podrían ayudarte a identificarlo, aunque sean bebés o chiquitines, para que puedas interactuar con ellos de una manera más adecuada.
1. Antes de cumplir los 12 meses
Se pueden reconocer los síntomas del autismo en bebés desde los primeros 9 o 12 meses. Suele suceder cuando los padres o aquellos que interactúan con el niño notan que el pequeño no alcanza los logros típicos del primer año de vida. Algunas de las señales que podrían indicar que tu bebé sufre de autismo, son las de índole comunicativa:
👶 No responde cuando lo llaman por su nombre aunque tenga 9 meses de edad
👶 No mira a los ojos o no mantiene el contacto visual, tampoco presta atención a caras nuevas.
👶 No responde a los ruidos fuertes.
👶 No agarra ni sostiene objetos.
👶 No le sonríe voluntariamente a la gente o lo hace por su cuenta.
👶 No trata de atraer la atención a través de acciones.
👶 No tiene ningún interés en participar en juegos interactivos con las personas.
2. Después del año
Cuando tienen más meses de vida pueden ser visibles otros aspectos que podrías identificar:
👣 Hace pocos o ningún gesto, por ejemplo, no dice adiós con la mano.
👣 No apunta a algo interesante para mostrarlo.
👣 Problemas gastrointestinales, como el estreñimiento.
👣 No muestra expresiones faciales como de felicidad, tristeza, enojo o sorpresa.
👣 No nota cuando otras personas están lastimadas o molestas.
👣 No nota a otros niños ni juega con ellos.
👣 No canta, baila ni actúa para usted.
👣 No juega como los demás.
3. La forma de interactuar con personas a su alrededor
Para los niños con autismo puede ser difícil empatizar, mostrar empatía o entender la perspectiva de otra persona de una manera común, por lo que pueden parecer indiferentes y antipáticos. Debido a que no saben cómo reaccionar ante una situación complicada, pueden llegar a reírse cuando alguien está lesionado, o responder con poca o ninguna emoción al dolor o a la alegría de alguien más.
Incluso ellos pueden mostrarse distantes con sus familiares, sin interés en establecer vínculos emocionales con sus padres, hermanos u otros niños de su misma edad. Tienden a evitar el contacto visual y a permanecer solos, por lo que están desconectados emocionalmente del mundo. Sin embargo, esto no quiere decir que no tengan sentimientos, sino que no saben cómo expresarlos.
4. Prefiere la comunicación no verbal
Debido a que a los niños con autismo tardan en desarrollar el lenguaje e incluso después de hacerlo tienen problemas para expresarse, es más fácil para ellos recurrir a la comunicación no verbal. Pueden utilizar herramientas tanto físicas como visuales, como, por ejemplo, dibujos o gestos para indicar algo.
5. Necesita mantener rutinas repetitivas
Desarrollan patrones estrictos y repetitivos al realizar actividades que les interesan. Por lo general, las cosas que los atraen requieren de toda su atención y pueden pasar largos períodos enfocados o repitiendo la misma palabra. Les gusta mantener una rutina diaria para saber lo que sucederá todos los días. Por ejemplo, siempre quieren tomar el mismo camino a la escuela, o comer exactamente la misma comida para la cena. Debido a lo estrictos que son con la rutina, el hacer cambios puede resultar inconcebible para ellos, y podrían rechazarlo por completo.
6. Puede ser obsesivo con su comportamiento
A menudo, los chicos con autismo son rígidos e incluso obsesivos en sus comportamientos, actividades e intereses. Pueden realizar movimientos corporales repetitivos, como mover sus manos constantemente, balancearse hacia adelante y hacia atrás o dar giros. Se obsesionan con objetos como llaves, ligas o interruptores de luces, y los usan como juguetes. Se interesan por un tema limitado, el cual suele involucrar números o símbolos (mapas, placas o estadísticas deportivas). Necesitan que todo mantenga un orden especifico, por ejemplo, alinean sus juguetes de una manera en especial y no toleran que alguien lo cambie. Mantienen una postura anormal o incluso pueden moverse de una manera extraña.
7. Puede reaccionar de manera exagerada
Puede tener dificultades para regular sus emociones y actuar de manera desproporcional ante una situación que parece normal. Por ejemplo, podría comenzar a gritar, llorar o reír histéricamente sin razón aparente. Cuando está estresado, él o ella puede exhibir un comportamiento disruptivo o incluso agresivo (romper cosas, golpear a otros o lastimarse a sí mismo). Además, puede no entender cuándo se encuentra en una situación de peligro, como el movimiento de vehículos o alturas, pero, a la vez, tenerles miedo a los objetos inofensivos, como un animal de peluche.
8. Muestra dificultad para hablar y comprender el lenguaje
Por lo general, los niños comienzan a hablar o a imitar el sonido que hacen las personas con quienes interactúan alrededor del año y medio. En el caso de los chicos con autismo, estos desarrollan las habilidades lingüísticas mucho después. Pueden hablar con un tono de voz anormal, con un ritmo extraño, o repetir palabras y frases una y otra vez, sin intención de comunicar algo en específico. Les cuesta iniciar una conversación o mantenerla. No entienden algunas oraciones o preguntas simples y toman lo que se dice literalmente. Carecen de humor, ironía y sarcasmo.
9. Puede tener problemas sensoriales
En algunos casos, los chicos con autismo pueden llegar a reaccionar de forma exagerada o desentenderse de los estímulos sensoriales. A veces pueden ignorar a las personas que les hablan, incluso hasta el punto de parecer sordos. Sin embargo, en otros momentos pueden verse perturbados por el ruido, inclusive por los sonidos más suaves. Los ruidos repentinos, como el timbre de un teléfono, pueden causarles molestias a las cuales responderán cubriéndose los oídos y haciendo ruidos repetitivos para ahogar el sonido ofensivo. Los niños también tienden a ser muy sensibles al tacto (no les gusta que los toquen) y a los diferentes tipos de texturas. Pueden encogerse con una palmada en la espalda o con la sensación de cierta tela contra su piel.
10. Tiene dificultad para reconocer las expresiones faciales
Pueden tener dificultades para reconocer las expresiones faciales (por ejemplo, no entienden que la madre está molesta con ellos cuando esta tiene el ceño fruncido). Tampoco comprenden las señales comunicativas referentes al tono de voz, no saben distinguir si la persona que está hablando lo hace con un tono feliz, triste o molesto. Les cuesta diferenciar entre lo real y lo imaginario, ya que son muy imaginativos y suelen vivir en sus propios mundos.
11. Le cuesta identificar y expresar sus emociones
Debido a los diferentes niveles de autismo que existen, algunos chicos con el trastorno pueden mostrar sus sentimientos de una manera similar que los niños de su misma edad (por ejemplo, si siente dolor, puede que se ponga a llorar). Sin embargo, generalmente les cuesta describir sus sentimientos. También puede parecer que no responden emocionalmente, o que sus respuestas a veces son exageradas. Por ejemplo, pueden enojarse muy rápidamente y armar un escándalo por un pequeño inconveniente.
¿Sabías que famosos como Leo Messi, Greta Thunberg, Bill Gates, Tim Burton y Susan Boyle están diagnosticados con autismo? ¿Conoces a alguien en tu círculo que padezca este trastorno?