10 Señales de que lo mejor es terminar la relación aunque sea doloroso
Hay quienes piensan que, antes, las parejas duraban más porque se amaban más. Pero según una encuesta reciente, lo que sucede es que los jóvenes de hoy prefieren estar solos a tener que aguantar cosas que nuestros abuelos sí aguantaban. Parece que actualmente el objetivo no es “durar mucho” con tu pareja, sino encontrar quien te haga realmente feliz y no estar padeciendo la relación.
1. Tu pareja suele amenazar con que te dejará
Si tu pareja amenaza con dejarte, por ejemplo, cuando discuten, o cuando no logra obligarte a hacer lo que quiere, esto podría ser una forma de manipulación psicológica. Está usando tu miedo al abandono para controlarte. Este comportamiento controlador puede extenderse a diferentes áreas de tu vida, por lo que es importante reconocerlo y detenerlo antes de lastimarte.
2. Rompen y regresan constantemente
En promedio, más de 1/4 de las parejas romperán y volverán a estar juntos en algún momento, según una investigación. Y esto incluso podría terminar convirtiéndose en un ciclo interminable de relaciones intermitentes. Tal vez te estés cuestionando y decidas darle a tu pareja una segunda oportunidad, o tienes miedo de dejarla ir y seguir adelante. Pero es importante romper ese ciclo, porque este tipo de relación podría no ser beneficioso para ti ni para la otra persona.
Muchas de las parejas que se separan y luego se reconcilian varias veces, discuten con más frecuencia, se sienten más inseguras sobre su futuro y se sienten menos satisfechas con su relación que las que no lo hacen.
3. No quieres compartir buenas noticias con tu pareja
Si ha sucedido algo positivo en tu vida, pero ni siquiera se te pasa por la cabeza compartirlo con tu pareja, podría ser una señal de que tu relación está en problemas. Esto podría significar que sientes que tu felicidad es irrelevante para la otra persona, porque no se preocupa por ti tanto como antes. Y si eso es cierto, y no te anima de verdad ni se siente feliz cuando tienes éxito, puede que sea hora de marcharte.
4. No te sientes bien contigo
No sentirte bien contigo mismo en una relación puede ser agotador, especialmente si no te gusta en quién te has convertido gracias a tu pareja. Tal vez te hayas distanciado de tu familia o te sientes menos motivado para intentar alcanzar tus metas. Si tu pareja te reprime constantemente, en lugar de inspirarte y apoyarte, es hora de sacarla de tu vida.
5. Tu relación es unilateral
Si tu pareja solo quiere estar contigo cuando te necesita, por ejemplo, cuando tuvo un mal día en el trabajo o cuando surgen otros problemas, esta no es una buena señal. Es posible que lo haga para llamar la atención, sin preocuparse por lo tú que necesitas. Y si constantemente haces todo el trabajo en la relación, brindándole apoyo a tu pareja, y ella no hace lo mismo por ti, es posible que te quedes atrapado en una relación tóxica.
6. Tu pareja te critica constantemente
Una cosa es mencionar lo que no te gusta del comportamiento de tu pareja, lo cual puede ser algo saludable y puede ayudarlos a comunicarse mejor entre sí. Pero las cosas no están bien cuando tu pareja critica tu personalidad y carácter.
Cuando hace eso está dejando salir su frustración contigo, te culpa y no espera que cambies para mejor. Estas personas a menudo se sienten insultadas fácilmente y necesitan defender su ego. Esto puede llevar a que tú y tu pareja pierdan el respeto mutuo e incluso sientan desprecio para con el otro. Entonces, si has notado que esto sucede con frecuencia y no hay forma de detenerlo, podría ser mejor dejar a esa persona.
7. Vives en el pasado
Si piensas en lo mucho que te divertías con tu pareja y en lo feliz que eras con ella en el pasado más de lo que disfrutas la relación en el presente, esto es una señal de alerta. Estar enamorado del recuerdo de la otra persona o de cómo solía ser tu relación no te traerá felicidad una vez que te des cuenta de que esto es lo único que te impide irte. Por eso es importante distinguir entre lo que se fue y no regresará, y lo que es real y por lo que vale la pena quedarse.
8. Tu relación es superficial
Cuando acabas de conocer a alguien, es comprensible que no te abras de inmediato y le reveles tus secretos más profundos. Las conversaciones se centrarán en cosas más simples, como tus pasatiempos o tu trabajo. Pero es natural que se acerquen con el tiempo, lo que significa que no tienes miedo de mostrar tu lado más vulnerable y discutir temas más serios.
Si has estado con alguien durante mucho tiempo y aún no han llegado a esa etapa, podría ser una señal de que tu pareja no es la adecuada para ti. Puede ser porque se sienten inseguros o porque se abrieron a alguien en el pasado y fueron rechazados. Pero si le muestras constantemente que quieres tener una conexión más profunda y no responde de la misma manera, puede significar que la persona correcta te está esperando en otro lugar.
9. Tu pareja es demasiado impredecible e intensa
Algunas personas pueden ser agradables y encantadoras en un momento, y luego enojarse repentinamente al siguiente. Este comportamiento puede hacer que te sientas asustado e intimidado, y como si siempre tuvieras que caminar sobre cáscaras de huevo a tu alrededor para evitar desencadenar estas reacciones, incluso con cosas mínimas. Eso significa que tu pareja es emocionalmente volátil.
Puede ser porque tiene ansiedad o depresión, o por problemas de ira. Estas cosas se pueden solucionar. Pero si tu pareja no reconoce el problema y no está dispuesta a trabajar en sí misma, debes elegir lo que es mejor para ti y dejar esta relación que te hace sentir asustado y confundido.
10. Tienes miedo de estar solo
El miedo a estar solo no es una razón suficiente para mantener una relación, especialmente si hay señales de que tu pareja no es adecuada para ti y no eres feliz. Estudios han demostrado que las personas que temen estar solteras se conforman con cualquier pareja por el simple hecho de tener una relación, sin importar la calidad de esta. Sin embargo, eso no mejora la situación y ese miedo también hará que sea más difícil salir de una situación insatisfactoria.