10 Trucos simples con sal que pueden hacerte la vida más sencilla
Es bien sabido que, un ingrediente que no falta en casi cualquier cocina del mundo, es la sal. Se lo echamos prácticamente a todas las comidas. Pero resulta que este mineral sirve para muchísimas cosas más. Por ejemplo: dejar reluciente tu lavadora o devolverle el antiadherente a tu sartén. Estas y más cosas se pueden hacer muy fácil con tan solo un poco de sal. No te preocupes, que nosotras te enseñamos cómo. Lee hasta el final porque también tenemos un bono para ti.
1. Cura los calambres
Este truco lo usa ni más ni menos que el tenista Rafael Nadal. Cuando los calambres aparecen en su cuerpo, toma un poco de agua con sal diluida y eso lo ayuda a recuperarse de los dolores. No siempre será la solución, pero puede que te ayude si debido a un cambio en tu alimentación o por transpirar mucho, tu cuerpo pierde la sal necesaria para funcionar correctamente.
2. Elimina las manchas de la madera
El tiempo y las reuniones en tu hogar van dejando marcas sobre tus muebles que se vuelven difíciles de eliminar. Utilizando una mezcla de sal y aceite de oliva, puedes dejar como nueva la madera. ¿Cómo? Pon un poco de sal, un poco de aceite y, con la ayuda de un paño, frota durante unos minutos. Luego pasa otro paño húmedo y seca la superficie. ¡Listo, tienes un mueble reluciente de nuevo!
3. Limpiar y destapar las cañerías
Si lo que quieres es destapar las cañerías de manera rápida y eficaz, lo que tienes que hacer es usar sal y bicarbonato de sodio. Procura hacer esto durante la noche, cuando ya no vayas a usar el fregadero o lavabo. Mezcla media taza de sal y una de bicarbonato en agua hirviendo, y luego vierte la mezcla en la cañería. Por la mañana, deja caer agua caliente y el problema debería estar resuelto.
4. Alarga la vida de tus escobas y esponjas
¿Tu escoba ya está vieja y necesitas cambiarla? Bueno, cuando compres una nueva, haz esto antes de utilizarla por primera vez. Prepara una solución de agua con sal en un balde y sumerge el cepillo durante unos minutos allí. Esto prolongará la vida útil de un artefacto clave para la limpieza de tu hogar, la amada escoba.
También puedes usar el mismo truco para tus esponjas de baño o para la cocina. Todo lo que debes hacer es que, después de usarlas, debes remojarlas en agua con sal. Esto hará que te duren más tiempo y se mantengan limpias.
5. Deja como nueva tu lavadora
Vierte un poco de sal y un poco de vinagre dentro. Luego toma un cepillo y restriega todo el interior aprovechando la pasta que forman los ingredientes. Después, con un poco de agua, ve removiendo los residuos que van quedando. Cuando termines, sécala y verás que todo se ve más brillante. Puedes repetir el proceso completo hasta que tu lavadora parezca recién sacada de fábrica.
6. Enfría bebidas rápidamente
¿La lata o botella de tu bebida favorita está más caliente de lo que te gustaría? Una solución para acelerar el proceso de enfriamiento es utilizar agua, hielo y sal. ¿Cómo? Pon estas tres cosas en un recipiente, agrega lo que quieras enfriar, mezcla un poco todo y deja reposar. En 5 minutos podrás disfrutar de una bebida fresca. ¡De nada!
7. Desempolva tus flores artificiales
Solo necesitas dos cosas: una bolsa de plástico y sal gruesa. Pon las flores dentro de la bolsa, agrega una buena cantidad de sal y sacude (con cuidado). Gran parte del polvo adherido a las flores será atrapado por la sal, dejando así tus arreglos decorativos mucho más limpios.
8. Recupera el antiadherente de tu sartén
Si ya no quieres que la comida se siga pegando a tu sartén, esto es lo que debes hacer. Primero limpia la sartén con agua y jabón; sécala muy bien. Después, coloca una buena cantidad de sal sobre la sartén y déjala sobre fuego alto en la hornilla. Cuando la sal tomé un color café, es momento de retirarla con un pedazo de papel húmedo. ¡Y listo! Tu sartén estará como nueva.
9. Prepara plastilina casera
Necesitas harina, sal, aceite y agua. Las proporciones son las siguientes: tres tazas de harina, una taza de sal fina, una taza de agua a temperatura ambiente, entre 2 y 5 cucharadas de aceite y, si quieres darle un toque especial, colorante apto para consumo. El procedimiento es simple: pon todo junto (menos el colorante) en un recipiente con solo 2 cucharadas de aceite y amasa. Si ves que queda muy dura, ve agregando aceite de a media cucharada hasta encontrar la consistencia ideal.
Una vez que tengas lista la masa, opcionalmente, agrega unas gotitas de colorante y amasa hasta que la plastilina tenga un color uniforme. Tienes un producto que no lleva cocción ni es tóxico con el que puedes entretener a los niños. Lo último que tienes que saber es que debes guardarla bien cerrada (para que no se seque) y fuera de la heladera. ¡Puede durarte semanas e incluso meses!
10. Quita manchas de transpiración
Con tan solo 1 cucharada de sal y los elementos habituales de lavado, puedes renovar tus prendas de vestir. El procedimiento es el siguiente: humedece la tela y vierte la sal sobre toda la mancha. Pon la prenda en remojo y déjala 12 horas. Cuando pase este tiempo, frota la tela para que la sal penetre mejor. Luego solo queda lavar y enjuagar normalmente.
11. Evita que tus ventanas se empañen en días lluviosos
Este truco es muy sencillo. Solo necesitas un trapo, agua y sal. Basta con limpiarlos con un poco con esta mezcla, y eso hará que los vidrios tarden más en empañarse o congelarse en días de lluvia.
Bono: Reduce las bolsas de tus ojos
En este caso no se trata de una aplicación concreta, sino de que lo que se aconseja para que las bolsas debajo de tus ojos desaparezcan es que reduzcas tu consumo de sal. ¿Por qué? El consumo de alimentos muy salados hace que tu cuerpo retenga más líquidos y esto potencia la hinchazón ocular. Lo bueno es que la sal que quites de tu dieta puedes utilizarla para algunos de todos los trucos que te dimos en esta lista. ¡Todo resuelto!
¿Qué otro uso conoces que se le puede dar a la sal? ¿Qué otros trucos empleas en tu día a día para hacerte más fácil las actividades diarias?