10 Descuidos comunes en el cuidado del cabello y cómo evitarlos
Es frecuente que muchas de nosotras andemos en busca de soluciones para tener una melena sedosa y manejable. Pero, la realidad es que a veces no contamos con el tiempo suficiente para todos esos remedios complicados y vamos de prisa sin cuidar nuestro cabello como se debe. Quizá sea momento de cambiar algunos pequeños hábitos que sí podrían hacer esa gran diferencia.
En Bella y Genial te queremos compartir algunos tips fáciles con los que podrías tener una cabellera saludable y hasta casi envidiable sin mucho esfuerzo.
1. Te cepillas el pelo con demasiada frecuencia
Al igual que cualquier otra práctica de cuidado del cabello, el cepillado debe realizarse de forma adecuada. Se sabe que cepillar el pelo ayuda a estimular el cuero cabelludo, lo que favorece su crecimiento, pero expertos han descubierto que un cepillado excesivo puede provocar su caída. Por eso no recomiendan más que cepillarse el pelo dos veces al día, por la mañana y por la noche.
2. No cortas el pelo regularmente
Aunque te esfuerces por hacer crecer tu cabello, necesitas un programa de recorte adecuado. La cuestión es que recortar el pelo con regularidad le da un aspecto saludable, hace que parezca más grueso y es estupendo para el crecimiento, porque te deshaces de las partes dañadas. No hace falta que te cortes mucha cantidad a cada rato; con cortar 1 cm cada 12 semanas será suficiente, según los expertos en cabello.
3. No bebes suficiente agua
Creemos que hay innumerables razones por las que debemos tener en cuenta nuestra ingesta diaria de agua, pero poco sabíamos que beber suficiente de este líquido es beneficioso para nuestro cabello. Se ha demostrado que el agua es un ingrediente clave que contribuye al crecimiento del pelo. Por lo tanto, es posible que este deje de crecer por completo si no bebes suficiente agua.
4. Te saltas el acondicionador
El acondicionamiento forma parte de la rutina de lavado del cabello. El uso de un acondicionador es esencial porque suavizar el pelo también ayuda a restablecer el equilibrio de la producción de grasa que se puede incrementar en exceso usando algunos champús y otros factores. Aunque el acondicionador se suele utilizar justo después del champú, se dice que aplicar primero este producto hará que el pelo tenga más volumen.
5. Utilizas el equipo de peinado con calor con demasiada frecuencia
Cambiar de peinado es una tentación, por eso es difícil abstenerse de utilizar equipos con calor. Sin embargo, podemos reducir el número de veces que utilizamos temperatura para mantener nuestro pelo sano. Pero si notas algunos signos de daño por calor, como un cabello que se enreda con facilidad o uno demasiado seco, es el momento de tratarlo según tu tipo de pelo y evitar el calor durante un buen tiempo.
6. Utilizas productos demasiado fuertes
Antes de ponerte algo en el pelo, debes conocer los ingredientes de los productos. Hay algunos que debes evitar, como la silicona y los elementos a base de alcohol, que podrían ser la verdadera causa de los daños en el cabello. Recuerda que debes tratar tu pelo con delicadeza y utilizar lo que mejor se adapte a él.
7. Utilizas una temperatura de agua incorrecta
La temperatura incorrecta del agua puede ser muy perjudicial para el cabello, ya que hay una específica que debe utilizarse en cada paso. Como el agua caliente abre los poros y limpia a fondo, es mejor masajear el cuero cabelludo y lavar el pelo con agua tibia. Por otro lado, lava el acondicionador con agua fría, ya que esto sellará la cutícula del cabello.
8. Te saltas los tratamientos con aceites esenciales para el cabello
Uno de los consejos que nos daban nuestras madres y abuelas era que usáramos aceites esenciales para el cabello. Son muy beneficiosos, solo tenemos que encontrar los productos hechos para nuestro tipo/textura de cabello. Una cosa que sabemos con certeza es que es la mejor manera de proteger y nutrir el pelo seco y quebradizo. Puedes hacerlo en casa u optar por un tratamiento de aceite en el salón. Solo asegúrate de hacerlo de la manera correcta y tu cabello te lo agradecerá.
9. No comes suficientes proteínas
Una buena fuente de proteínas también es buena para el cabello, por eso debemos ser conscientes de lo que introducimos en nuestro organismo si buscamos un pelo largo, fuerte y brilloso. Aparentemente, el cabello está hecho de proteínas, por lo que cualquier alimento a base de proteínas, como los huevos, lo hará aún más fuerte y saludable.
10. Duermes con el pelo mojado
Es muy probable que hayas salido de la ducha tan cansada que hayas dormido con el pelo mojado, seguro que todos lo hemos hecho. Pero no es de extrañar que sea un hábito perjudicial, porque el pelo es más débil cuando está mojado, por eso se vuelve propenso a dañarse. Además, el calor de tu cabeza y la humedad prolongada en tu pelo favorecerán el crecimiento de bacterias que provocarán caspa.
¿Qué otros hábitos conoces que sí ayuden a reparar el cabello dañado?