11 Trucos de estilo de la princesa Diana que las apasionadas por la moda moderna encuentran útiles
La princesa Diana es recordada por muchas razones, entre ellas, su sentido de la moda. Con respecto a su estilo, hay numerosas características para atribuirle: valiente, fuera del molde, poco estándar y siempre impecable. Es por estos rasgos que la querida princesa del pueblo sigue siendo fuente de inspiración incluso para los fashionistas modernos.
1. Lentes como objeto de estilo
Diana no usaba con demasiada frecuencia un accesorio como lentes con cristales sin aumento. Pero si lo hacía, se trataba de monturas inusuales, a menudo similares en forma a las que se usan para los lentes de sol.
Pero amaba más las gafas de sol y las usaba en diferentes eventos, tanto formales como informales. Además, podía combinar lentes deportivos con atuendos clásicos, y le encantaban las monturas grandes.
2. Esmalte de uñas rojo
Este detalle puede parecer inofensivo, pero no en el caso de las personas de sangre real, en el protocolo de las cuales solo se permiten tonos de manicura color beige. El esmalte rojo de Diana mostraba su valentía y, tal vez, reflejaba una de sus posturas ante la vida, de la que habló en una entrevista: “No sigo las reglas, pienso con el corazón, y esto me ha llevado a tener algunos problemas”.
Se cree que la princesa empezó a elegir el esmalte rojo justo cuando su matrimonio con Carlos comenzó a colapsar y ella sentía la desaprobación de la familia real. Eran pequeñas señales de que se estaba oponiendo al sistema.
3. Acento en la parte superior y mangas de pernil
Allá por los años 80, Diana fue casi la primera en usar las mangas abultadas en diferentes variantes, y no han perdido terreno hasta el día de hoy. Se cree que la princesa tenía un tipo de cuerpo algo masculino, es decir, de hombros anchos. Sin embargo, no dudaba en usar estas mangas, y las presentaba con mucho estilo: con volumen, cortes, capas y forros diferentes.
4. Asimetría
En sus elegantes trajes largos, Diana rara vez enfatizaba el escote. Pero la asimetría que dejaba descubierto un hombro era bastante común en sus atuendos. Un ejemplo de esto fue uno de sus trajes icónicos: un vestido de seda azul que el propio Versace cosió para ella en 1996.
5. Mezcla del estilo clásico y el deportivo
Diana sabía cómo lucir apropiada y tierna incluso con atuendos deportivos, que eran inusuales en ella, pero que a veces combinaba con ropa de todos los días. La princesa añadía un poco de humor al look, por ejemplo, como en el caso de la camiseta con un globo en el pecho y una chaqueta oversize. Una imagen ligeramente traviesa se complementaba con una gorra. En cambio, los pantalones cortos de ciclismo, en los que se la vio más de una vez, a menudo eran combinados con una sudadera.
6. Accesorios poco estándares
Las joyas de Diana siempre enfatizaban su personalidad. No importaba si eran accesorios cotidianos relativamente simples o piezas para eventos importantes. Por ejemplo, un lacónico collar con la letra D. Sus amigos se lo regalaron cuando ella cumplió 16 años. La princesa lo apreciaba mucho y se lo ponía de vez en cuando ya estando casada.
Uno de los collares de perlas favoritos de Diana, que tenía un gran zafiro, combinaba con sus pendientes en forma de gotas y su anillo de bodas. Pero tenía un secreto: la pieza central era un broche de zafiro que le había regalado la reina Isabel. Diana usaba esta joya con estilo de esta original manera.
La princesa prefería los collares cortos que acentuaban la agraciada curva de su cuello, y casi siempre los combinaba con pendientes.
Diana combinaba una joya muy significativa para ella, su anillo de compromiso con un zafiro azul, con diferentes atuendos, y lo usaba según el formato clásico: en el dedo anular.
Pero otros anillos, que Diana usaba para completar sus looks, a menudo se los ponía en el dedo meñique, y esto atraía una atención adicional hacia ellos.
7. Estilo masculino
Una pajarita, cuellos de tortuga ásperos, chaquetas de corte masculino, trajes de hombre... Esta decisión era tomada por Diana y su estilista con bastante frecuencia para agregar un poco de estilo masculino a su imagen y así enfatizar aún más la feminidad. Una solución particularmente poco convencional para la realeza era la pajarita, que la princesa usaba con diferentes atuendos.
8. Total look
Aunque usar un atuendo monocromático parece una decisión simple a primera vista, en realidad requiere mucho sentido del estilo. Y Diana lo tenía. Sus vestuarios eran diferentes en estilo, y ella no tenía miedo de usar tonos atrevidos y combinaciones de accesorios.
9. Tonos delicados
Diana amaba los colores brillantes y no les tenía miedo, pero los tonos pastel y las telas delicadas (encajes, gasa, seda) también tenían un lugar en su armario. Los usaba tanto en la vida cotidiana como durante sus apariciones formales.
10. Juego con los contrastes
Y otra solución brillante de Diana: los contrastes. Las combinaciones de colores atrevidos le sentaban muy bien. La familia real nunca tuvo miedo de los tonos jugosos, basta con ver los looks de Isabel II. Pero Diana diversificó este enfoque también. Después de todo, el contraste siempre atrae más atención que un solo color brillante.
11. Color rojo
La princesa tenía muchos trajes rojos, y no solo eran vestidos, sino también chaquetas, suéteres, abrigos y toda una colección de faldas. En sus looks combinaba el rojo con colores cercanos y contrastantes.
¿Cómo ha influido Diana en tu vida?