Adamari López desata críticas por los vestidos que usó su hija en su primera comunión
Pocas cosas son tan emocionantes para los papás como planear un festejo para sus hijos. Ya se trate de un cumpleaños, un bautizo o la primera comunión, siempre es divertido planificarlo todo: desde la elección de la comida, los recuerdos y, por supuesto, la ropa que se pondrán. La actriz puertorriqueña Adamari López vivió esta felicidad al organizar la primera comunión de su hija, sin embargo, recibió una oleada de críticas por algunos detalles de la fiesta.
Adamari López es una actriz y presentadora puertorriqueña, reconocida por su talento y su carisma en la industria del entretenimiento hispanoamericano. Nacida en San Juan en 1971, Adamari ha logrado una carrera exitosa en la televisión, el cine y el teatro, convirtiéndose en una de las figuras más queridas del público latino. Desde temprana edad, mostró interés por la actuación y el canto, por lo que comenzó su carrera en la televisión puertorriqueña a los 6 años, participando en programas infantiles.
Luego de graduarse de la escuela superior, decidió mudarse a México para estudiar actuación en el Centro de Educación Artística de Televisa. Fue justamente en México donde Adamari obtuvo su primer papel protagónico en la telenovela Mundo de juguete en 1974, a los 3 años de haber llegado al país. A partir de entonces, su carrera despegó rápidamente, protagonizando exitosas producciones como Amigos x siempre, Locura de amor y Gata salvaje, entre otras.
La trayectoria de Adamari es muy variada: ha incursionado en el cine, actuando en películas como Luz en el camino y Ladrones a domicilio. En el teatro, ha participado en obras como El diluvio que viene y La magia de Broadway. En el 2005, se unió al programa Un nuevo día de Telemundo como presentadora, convirtiéndose en una de las caras más reconocidas del programa. También ha participado en otros programas de la cadena como Levántate y La Voz Kids.
En el 2019, Adamari López se convirtió en una de las participantes de la decimosexta temporada del programa de baile Mira Quién Baila de Univisión. A pesar de no tener experiencia previa en el baile, demostró su determinación y dedicación en cada una de sus presentaciones, llegando a la final del concurso y ganando el primer lugar. Su victoria fue celebrada por sus seguidores y colegas en la industria del entretenimiento, quienes destacaron su talento, perseverancia y humildad como virtudes que la han llevado a conquistar el corazón del público.
Sin embargo, el camino de Adamari no ha sido fácil en términos personales. En el año 2000, fue diagnosticada con cáncer de seno, una noticia que cambió su vida para siempre. Enfrentando el dolor físico y emocional de la enfermedad, la actriz luchó con valentía y determinación, convirtiéndose en una inspiración para muchas mujeres que también han vencido en esta batalla.
En medio de su lucha contra el cáncer, Adamari conoció al bailarín español Toni Costa, con quien comenzó una relación en el 2011. La pareja se casó en el 2014 y juntos tienen a su hija Alaïa. Después de haber salido victoriosa en esta dura prueba, Adamari se convirtió en una activista en la lucha contra la enfermedad, compartiendo su experiencia y motivando a otras mujeres a hacerse exámenes regulares y a llevar un estilo de vida saludable.
Por supuesto, el amor por los hijos es uno de los sentimientos más fuertes que un padre o una madre puede experimentar. Es por esta razón que Adamari López decidió realizar una fiesta para celebrar la primera comunión de su hija Alaïa. La presentadora de televisión, que actualmente tiene 51 años, quería que este evento fuera mágico y memorable para su hija, así que hizo todo lo que estaba en sus manos para lograrlo.
Tras la ceremonia en la parroquia de Saint Louis en Miami, Estados Unidos, Adamari organizó una elegante recepción en el Hotel Baltimore en Coral Gables para los invitados. Junto con su ahora exesposo Toni, Adamari fue una excelente anfitriona y ofreció deliciosos platos internacionales, así como fotos profesionales que deslumbraron a los asistentes.
Sin embargo, lo que realmente llamó la atención de los usuarios de Internet no fue la lujosa fiesta, sino los atuendos que Alaïa escogió para su primera comunión. La hija de Adamari no usó solo un vestido, sino que lució 8 diferentes a lo largo de todo el día. Estas prendas fueron diseñadas por la española Mar Segovia, de la firma Marita Rial, quien creó una colección inspirada en el siglo XVIII y que Alaia pudo lucir. “Juntos, con sus trajes, ambas forman un rombo”, reveló la diseñadora sobre el significado de uno de los vestidos, que estaban inspirados en el amor de madre e hija.
A pesar de la felicidad de Alaia y de Adamari, los usuarios de las redes sociales no estuvieron de acuerdo con que la niña haya usado 8 vestidos en su primera comunión, criticando a su madre por ello. Algunos comentaron: “¿Dónde está la humildad en un momento tan importante como una comunión?”, “Parecía más un desfile de moda que una comunión”, “No puedo imaginar cómo será su boda entonces”, “Es solo vanidad”, “8 vestidos y nada en el corazón”, “Es demasiado. No se necesitan lujos para recibir a Dios”.
Afortunadamente, Adamari no dejó que estos comentarios empañaran la felicidad de un día tan importante para ella y su hija. La primera comunión es una tradición religiosa que se celebra en la Iglesia Católica en la que los niños reciben por primera vez la comunión, el sacramento que simboliza la unión con Cristo. Esta ceremonia es muy importante para los católicos, ya que se cree que al recibir la comunión, los niños obtienen la gracia de Dios y fortalecen su fe.
Esta ceremonia tan relevante suele llevarse a cabo cuando los niños tienen entre 7 y 12 años, aunque la edad puede variar dependiendo de varios factores. Los niños suelen prepararse para este sacramento durante varios meses, asistiendo a clases de catecismo y aprendiendo acerca de la fe y la historia de la Iglesia. Durante la ceremonia, los niños suelen vestir de manera formal, con trajes y vestidos blancos para simbolizar la pureza y la inocencia. También pueden llevar velas, rosarios y otros elementos religiosos que simbolizan su compromiso con la fe.
Después de recibir la comunión, los niños suelen celebrar con sus familias y amigos en una fiesta que puede ser más o menos elaborada, dependiendo de las costumbres locales. En algunos lugares, se celebra con una cena especial, mientras que en otros, se hace una fiesta con música y baile. En el caso de Adamari, lo hicieron con sus amigos y familiares, echando la casa por la ventana en honor de tan especial y único momento.