16 Viñetas de una psicóloga española que dejan en claro lo que es ser mamá (y, de paso, nos da unos consejos)
Mamen Jiménez es una psicóloga que vive en Madrid, y a través de sus dibujos logra expresar y plasmar lo transformador y hermoso que es ser madre. Aprovechamos para contactarla y hacerle un par de preguntas, las cuales encontrarás al final del artículo.
Bella y Genial encontró las ilustraciones de esta madre psicóloga muy certeras, y por eso quiere compartírtelas hoy.
1. Sin negarlo, por favor
2. La inexplicable realidad del calcetín
3. ¿Existirá algo como “suficiente cafeína”?
4. “La vaca no recuerda cuando fue ternera”
5. Darse cuenta de la edad
6. Tal vez necesita lentes
7. Qué lindo tenerlos todo el día en casa, ¿no?
8. Y también cuando tomo una siesta...
9. Definitivamente no
10. También cuenta para los viernes en la noche
11. El verano es la estación más larga del año
12. Por lo menos tenemos práctica para armar la maleta para lidiar con adolescentes
13. Imposiblemente injusto
14. Sin remordimientos
15. Así se vería la verdadera revista de maternidad
16. ¿Y nosotras?
Reflexiones
El modelo de supermamá debe poder con todo. Se nos pide que criemos a nuestros hijos como si no trabajásemos y que trabajemos como si no tuviéramos hijos. Estos estándares tan irreales nos hacen mucho daño porque “no llegamos”. Pero ese modelo no es real, no es factible, y en el camino de pretender llegar a él podemos dejarnos el pellejo. Seamos realistas, ¡somos humanas! Y no pasa nada por no llegar a todo, ¡porque es imposible llegar a todo!
Cuídate, eres importante. Evidentemente hay que atender y amar a los peques, son prioridad, pero nosotras también debemos serlo. Nuestro estado de ánimo, nuestra autoestima y, por lo tanto, nuestro bienestar, dependen (entre otras cosas) de cómo y con qué los alimentamos. La casa es importante, la lavadora es importante, ese proyecto del trabajo es importante, sí, pero nosotras somos prioridad.
Una cosa muy útil que ayuda mucho es hacernos una agenda realista: anotemos lo que racionalmente queremos hacer al día siguiente, lo que se puede hacer, no más. Cuando hacemos una agenda realista, al final del día lo que sentimos es satisfacción por lo hecho. Entran refuerzos. Sin embargo, si tenemos una lista poco realista, enorme, al final del día lo que tendremos será frustración por no haber llegado. ¡Y eso no sienta bien!
¿Cómo cambió tu vida después de ser madre?