“Me gustan mis 70 años, mis canas y mis arrugas”, Verónica Castro nos enseña sobre la aceptación y el amor propio
Aunque los estigmas y rechazos sobre las canas, arrugas y todo lo que viene con crecer han disminuido, definitivamente aún hay personas que no aceptan estos cambios. Por eso no está de más recordarnos con ejemplos lo bien que nos hace aceptarnos tal cual somos.
Verónica Castro es una mujer que se ama tanto a sí misma que no necesita seguir las tendencias de la sociedad, y por eso en Bella y Genial decidimos hacerle este artículo. Para ella y para ti también.
Verónica Castro ha sido reconocida, además de por su infinito talento, por ser uno de los rostros más bellos que ha tenido el mundo del espectáculo en México. Sus ojos verdes vibrantes y su pelo color castaño han enamorado a cientos de fanáticos a lo largo de sus 50 años de carrera artística. Con su gran talento para la actuación, llegaron a bautizarla como “la reina de las telenovelas”.
Esta combinación fabulosa de belleza y talento le permitió a Verónica mantenerse presente en todo tipo de producciones de la TV mexicana. Como bien sabemos, ser parte del mundo del entretenimiento hace que los artistas tengan que adaptarse a la exigencia de que no se note que el tiempo también pasa por ellos. De hecho, hasta hace pocos años, la misma Verónica teñía su pelo canoso y parecía conservar su tono de siempre.
Si bien la apariencia es crucial en el medio, la artista ha decidido demostrar que su amor propio también abarca la aceptación de sus canas y arrugas, las cuales son totalmente normales a sus casi 70 años. Sí, casi 70 años, aunque no los aparente. Y es que Castro ha optado por decirle adiós al tinte, y ahora posa feliz y orgullosa con un cabello cenizo, el cual la hace lucir mucho más natural y real. Este es un mensaje de alta autoestima que ha logrado transmitir fuerte y claro.
Como celebración de sus siete décadas de vida, Verónica prestó su rostro para engalanar la portada de una reconocida revista mexicana. Durante la entrevista de la edición, salió a relucir el tema de la edad y de cómo había surgido la decisión de dejarse crecer sus canas y olvidarse del tinte.
Al respecto, la actriz declaró: “Estábamos en la grabación de una película cuando mi mamá se puso muy mal de salud, y fue un tiempo en el que pensé dejar la carrera y dedicarme a cuidarla. Terminando de grabar me fui a casa de mi madre, dije adiós al maquillaje, y la pintura del pelo fue saliendo poco a poco”.
De igual modo, el entrevistador quiso conocer su opinión sobre el hecho de que las mujeres acepten su edad con dignidad y elijan lucir sus canas, independientemente de que sean figuras públicas. En este sentido, Verónica abrió su corazón y expresó: “Yo sí lo he aceptado y me ha gustado. Me gustan mis 70 años, mis canas y mis arrugas. Me gustan mis abandonos de mi cabeza, porque a veces se me va la onda y que no me acuerdo de cosas, pero tengo a un público maravilloso que me recuerda toda mi carrera. Este me ha hecho regresar al pasado, y me pongo muy feliz”.
En general, para Verónica, envejecer no debe tomarse como un aspecto negativo de la vida, sino todo lo contrario. Y es que, en su opinión, las canas y las arrugas no son más que la prueba fehaciente de que hemos vivido, disfrutado y gozado nuestro paso temporal. Para cerrar la exclusiva, la actriz afirmó: “Está bien que se vean los rasgos de las canas y de las arrugas, porque es huella de lo que vas dejando en el camino”.
Si algo ha dejado claro la actriz a través de sus palabras y sus publicaciones en sus redes sociales es que en lugar de quejarse o lamentarse porque su cabello ha perdido su pigmento, prefiere agradecer que sigue fuerte, viva y rodeada de personas que la aman sinceramente. Con frecuencia, Castro publica fotografías en compañía de sus hijos, Cristian y Michel, además de contar lo orgullosa que se siente de su nieta, Rafaela.
¿Cuál es tu opinión sobre las mujeres que aceptan sus canas y no se tiñen el cabello? ¿Y sobre las que sí lo hacen?