Una gata adora salir a pasear en motocicleta, por eso su dueño le hizo un casquito para protegerla
Misteriosos, independientes, algo ariscos pero mimosos, remolones y amantes del confort. Es posible que todos elijamos las mismas características a la hora de describir la personalidad gatuna. Sin embargo, al hacerlo nos quedamos solo con el modelo que vemos en los calendarios, y los felinos domésticos son bastante más que eso. Para comprobarlo, basta con conocer la historia de Rémy y su gata, Cathode.
Para romper con el arquetipo del gato de departamento, en Bella y Genial queremos contarte la historia de Cathode, la gatita que adora la velocidad y los deportes extremos.
Los primeros días de amistad entre Rémy y Cathode
Esta historia comenzó hace 6 años. Rémy quería un gato, y con esa idea fue a un refugio de animales. Y allí estaba Cathode, que apenas lo vio caminó directo hacia él. Podríamos decir entonces que fue ella quien eligió a su dueño.
Los primeros días de Cathode se limitaban a lo que todos pensamos que aman los gatos domésticos: el confort, la buena compañía, una siesta larga y los mimos de su dueño. Pero aunque la veía feliz, Rémy se sentía culpable por darle a la gatita solo una vida de departamento; quería que ella disfrutara del aire libre tanto como lo hacía él. Entonces, decidió ir un paso más allá.
Rémy descubrió la verdadera pasión de Cathode
En un principio, Rémy sacaba a pasear a Cathode en brazos creyendo que así ella se sentiría más segura. Pero pronto descubrió que, lejos de tener miedo, la gatita disfrutaba cada vez más de las salidas. Sí. Apenas unos días después, lo que había comenzado como un simple paseo empezó a tomar velocidad, y Rémy no tardó en darse cuenta: Cathode adoraba los deportes extremos.
Parapente, remo, esquí, bicicleta... cualquier medio que implicara conocer nuevos lugares y viajar junto a su dueño comenzó a ser el elegido. Y había algo más que fascinaba a esta incondicional copilota: asomar su cara y sentir el viento en los bigotes, sobre todo cuando paseaba en moto.
Rémy diseñó un casco a medida para Cathode
Aprovechando sus conocimientos como ingeniero, Rémy diseñó para Cathode un casco con gafas para proteger sus ojos y dejar sus bigotes al viento. Primero armó un molde de papel y luego lo rediseñó en el ordenador para después imprimir una versión 3D. Y este fue apenas el prototipo, ya que luego vinieron muchos más que acompañaron la vida “motoquera” de Cathode.
Rémy y Cathode confían el uno en el otro, se sienten seguros y felices acompañándose. Ahora, estos compañeros de aventuras son una verdadera familia, y el lazo que los une es, sin duda, tan indestructible como sus cascos.
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