Bella y Genial
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13 Famosos que llevaron al límite su mente y cuerpo por un personaje

¿Qué estarías dispuesto a hacer por obtener un trabajo? Puede que muchas de nosotras, contemplemos cambiar de ciudad o aprender nuevas habilidades. Pero los actores son capaces de hacer muchas cosas más para poder interpretar sus papeles de forma creíble, como entrenamientos intensos o cambios de peso. Resulta impresionante ver cómo muchos de ellos llevan al límite su cuerpo y su mente deslumbrando al público. A continuación, te presentamos algunos datos que lo demuestran.

1. Rachel McAdams

Rachel McAdams había soñado durante mucho tiempo con trabajar con el prestigioso director Terrence Malick. Sin embargo, a pesar de su gran entusiasmo, tenía un pequeño problema: era alérgica al pelo de caballos y también le daban miedo estos animales. A pesar de ello, cuando Terrence le preguntó si se sentía cómoda trabajando con animales, ella no tuvo reparos en decir que sí y hasta llegó a decir que le encantaban.

Así fue como Rachel inició el rodaje de la película Deberás amar (2012), pero, a medida que avanzaba el rodaje, la actriz empezó a sufrir las consecuencias de su alergia. Los ojos se le hincharon tanto que apenas podía ver.

2. Zac Efron

Reynaud Julien / APS-Medias / ABACA / Abaca / East News, © Baywatch / Paramount Pictures and co-producers

El actor Zac Efron, conocido por su atractivo físico, tuvo que someterse a un riguroso proceso para lucir su cuerpo musculoso y definido en la película Guardianes de la bahía. Su preparación física consistió en intensos entrenamientos de varias horas al día y una dieta estricta a base de proteínas y verduras de hoja verde.

Sin embargo, este proceso tuvo un costo muy alto para su salud. A pesar de los resultados visibles en su cuerpo, Zac sufrió depresión e insomnio. El actor reconoció que se había obsesionado demasiado con su físico y que había descuidado su bienestar mental y emocional.

Hoy en día, Zac promueve un estilo de vida activo y saludable, pero sin extremos. Reconoce que la salud mental es igual de importante que la física y que centrarse demasiado en obtener una imagen perfecta puede llevar a consecuencias negativas.

3. Nicole Kidman

Collin Xavier / Image Press Agency ABACA / Abaca / East News, © Moulin Rouge! / Twentieth Century Fox and co-producers

Nicole deseaba lucir impresionante en su papel en Amor en rojo y llegó a pedir que le ajustaran el corsé con mucha fuerza. Anhelaba tener una cintura de 46 centímetros, al igual que Vivien Leigh en Lo que el viento se llevó. De hecho, en un momento, los encargados del vestuario le apretaron tanto el corsé que Nicole terminó fracturándose una costilla.

Otro gran desafío para Nicole fue cantar en público durante el musical, algo completamente nuevo para ella que le generaba miedo y nerviosismo.

4. Jake Gyllenhaal

GilbertFlores@Broadimage / Broad Image / East News, © Everest / Universal Pictures and co-producers

La película Everest narra una historia que ocurre a una altura de 8,500 metros sobre el nivel del mar, donde la falta de oxígeno es una constante. Para poder entender mejor cómo se sentirían sus personajes, Jake Gyllenhaal y Josh Brolin decidieron experimentar estas condiciones en un simulador.

Ambos actores se sometieron a una altitud simulada de entre 8 y 10 mil metros, y decidieron permanecer en el simulador por un tiempo mayor al necesario, ya que disfrutaron la experiencia. Sin embargo, tres días después de la prueba, los actores comenzaron a experimentar una fuerte depresión.

5. Gwendoline Christie

Gwendoline estaba determinada a conseguir el papel de Brienne en la serie Game of Thrones, por lo que se preparó intensamente durante seis semanas, incluyendo sesiones de kickboxing, yoga, además de un cambio total en su dieta. Como resultado de su esfuerzo, logró perder 9 kilos. Sin embargo, cuando finalmente consiguió el papel, los entrenamientos se volvieron mucho más intensos.

Pero el mayor desafío para la actriz fue tener que despedirse de su larga y hermosa melena. Al ver su cabello corto por primera vez, Gwendoline no pudo contener las lágrimas y lloró durante dos horas sin parar. A pesar de la dificultad que supuso para ella, la actriz aceptó el cambio de look con valentía y compromiso hacia su personaje.

6. Jamie Foxx

KatieFlores@Broadimage / Broad Image / East News, © Ray / Universal Pictures and co-producers



Para interpretar al legendario cantante y pianista Ray Charles en la película biográfica Ray, Jamie Foxx tuvo la oportunidad de conocerlo en persona. Siendo pianista, Jamie obtuvo fácilmente la aprobación del músico para interpretar su papel. Además, el actor se sometió a una rigurosa transformación física, perdiendo 14 kilos para parecerse más a Ray, y su experiencia en comedia le ayudó a capturar con precisión la forma de comportarse del cantante.

Sin embargo, el mayor desafío para Foxx fue representar la ceguera de Ray Charles. El director le sugirió que se convirtiera en “ciego” temporalmente para poder entender mejor la experiencia. Así, a lo largo de 14 horas diarias, Jamie llevaba los párpados pegados y parches que imitaban los ojos. Al principio, el actor experimentó pánico y claustrofobia, pero con el tiempo se acostumbró, su actuación fue aclamada por la crítica y le valió un merecido Óscar.

7. Charlize Theron

Invision / Invision / East News, © Tully / BRON Studios and co-producers

Charlize Theron engordó alrededor de 22 kilos para su papel como madre de tres hijos en la película Tully. Esta no fue la primera vez que tuvo que ganar peso para un papel, ya que para su interpretación en Monster: Asesina en serie (2003) aumentó 14 kilos.

No obstante, en esta ocasión, Charlize experimentó consecuencias desagradables. Debido a la gran cantidad de alimentos poco saludables, como exceso de azúcar, la actriz experimentó una depresión por primera vez en su vida. Además, se dio cuenta de que a sus 42 años, no era tan sencillo perder peso como lo fue a los 27. Su sueño se vio afectado, se sentía muy débil y apenas lograba caminar en la cinta de correr. Fue necesario un año y medio de trabajo arduo y una alimentación sana para recuperar su forma física habitual.

8. Adrien Brody

Invision / Invision / East News, © The Pianist / Heritage Films and co-producers

Adrien Brody decidió hacer un gran cambio en su vida para su papel en la película El pianista. Renunció temporalmente a las comodidades de su vida: terminó su relación amorosa, vendió su automóvil, dejó su apartamento, se mudó y desconectó sus teléfonos. Además, con el fin de ser más auténtico como Władysław Szpilman, Brody tocaba el piano durante cuatro horas al día y pasaba hambre, llegando a perder casi 14 kilos, a pesar de ya estar bastante delgado.

La sensación de vacío y desesperación que experimentó Brody durante el rodaje se debió a la falta extrema de alimento. Tras finalizar la película, sufrió una depresión que duró aproximadamente un año. Pero su interpretación valió la pena, ya que se convirtió en el actor más joven en ganar el premio Óscar en los últimos años.

9. Demi Moore

Sebastien Courdji / KCS / East News, © G.I. Jane / Caravan Pictures and co-producers

Durante la preparación de su personaje para la película Hasta el límite, la actriz de 35 años y madre de tres hijos se sometió a un entrenamiento físico que incluso los profesionales rara vez experimentan. Para ser más específicos, todo el curso intensivo de entrenamiento que los verdaderos cadetes suelen completar se empaquetó en solo dos semanas en lugar de los 17 habituales, para la actriz y sus 40 compañeros de reparto.

En el primer día de entrenamiento, la actriz experimentó náuseas y ampollas en las piernas. A pesar de que se le dijo que no tenía que entrenar tanto como los hombres, vendó sus ampollas y decidió continuar con el entrenamiento hasta el final.

Además, en uno de los días, Demi Moore completó su transformación en Jordan O’Neill afeitándose ella misma la cabeza.

10. Jennifer Aniston

Invision / Invision / East News, © Cake / Cinelou Films and co-producers

En Cake: Una razón para vivir (2014), Jennifer Aniston interpretó a una mujer que sufría dolor crónico inusual. Para entender mejor su personaje, la actriz se acercó a un par de amigos que también padecían el síndrome de dolor crónico. Durante el rodaje, Jennifer llevaba un corsé que le impedía redondear los hombros y le obligaba a caminar con la espalda rígidamente enderezada. Después de usar el corsé durante cinco semanas, la actriz comenzó a sentir el dolor ella misma.

A pesar de esto, el hecho de tener que ganar algunos kilos adicionales para el papel no le desagradó en absoluto. Jennifer simplemente abandonó sus entrenamientos por unos meses y dejó de controlar estrictamente su dieta. Incluso llegó a disfrutar del proceso de subir de peso.

11. Matthew McConaughey

Para interpretar su papel en la película El club de los desahuciados, el actor Matthew McConaughey perdió 22 kilos y buscó la ayuda de un experto en dietas para hacerlo de manera saludable. En lugar de recurrir a bocadillos, optó por masticar hielo. Sorprendentemente, después de la pérdida de peso, el actor experimentó un aumento en su energía y fue capaz de dormir tres horas menos de lo habitual.

12. Natalie Portman

Para su papel en la película El cisne negro, la actriz se sometió a un riguroso entrenamiento que incluía horas de ballet diarias, así como natación para recorrer varios kilómetros al día. Además, practicó cross-training, que implica ejercicios para entrenar músculos que normalmente no se usan en su entrenamiento regular.

Aunque el entrenamiento intenso le permitió perder casi 9 kilos y parecer una bailarina profesional, también tuvo efectos negativos en su cuerpo. Desarrolló ampollas, sufrió roturas de uñas en los pies y llegó a torcerse una costilla debido a la intensidad del ejercicio.

Pese a todo, la actriz perseveró y logró desempeñar el papel de forma convincente en la película, siendo su actuación ampliamente reconocida por la crítica y el público en general.

13. Brendan Fraser

Invision / Invision / East News, © The Whale / A24 and co-producer

En The Whale, Brendan Fraser tuvo que enfrentarse a un gran desafío físico para interpretar a un hombre con obesidad mórbida. Durante el rodaje, el actor usaba un traje especial que le añadía entre 23 y 136 kilos de peso extra, lo que lo hacía sentirse extremadamente cansado. Incluso después de quitarse el traje, aún experimentaba mareos debido al esfuerzo físico que había hecho.

Fraser afirmó que el entrenamiento que tuvo que hacer para poder llevar el traje fue intenso y desafiante. De hecho, tuvo que desarrollar músculos que ni siquiera sabía que tenía. Además, para prepararse para su papel, Fraser se sumergió en el estudio de la depresión y el trastorno por atracón para poder representar con precisión la lucha emocional de su personaje.

Imagen de portada Invision / Invision / East News, The Whale / A24 and co-producer
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