Humberto Zurita y Christian Bach, un amor que duró 39 años y ha logrado traspasar las barreras de la muerte
El amor es una de las fuerzas más grandes que existen, y hay personas que deciden sellarlo a través del matrimonio prometiéndose estar juntos “hasta que la muerte los separe”. Aunque muchos aceptan esta promesa, muchos otros la rompen. Pero, el caso de Humberto Zurita y Christian Bach, demuestra que el cariño que dos personas puede durar mucho después de que uno de ellos ya no esté.
En Bella y Genial quisimos honrar el amor que estos dos actores demostraron, confirmando que cuando se tiene un afecto tan grande ningún límite lo detiene.
En 1980, Christian Bach, una actriz argentina, y el actor mexicano, Humberto Zurita se conocieron mientras ambos participaban en la telenovela Soledad. Pero, esta no fue la primera vez que él se había fijado en ella y quedar prendido por su belleza.
En una entrevista, el actor comparte: “Yo la conocí en una revista que era muy famosa en ese momento, Tele-Guía. Andábamos de gira Ana Martín y yo. La vi en la revista. Decía que acababa de llegar de Argentina, guapísima. Yo se la enseñé a Ana y le dije: ’Mira lo que me trajeron’. Y luego la conocí”.
Cuando se conocieron, ambos se encontraban en relaciones con otras personas, así que formaron una buena amistad entre ambos. Pero, el actor ha dejado claro que siempre la consideró una mujer muy guapa. Poco a poco, el cariño que él sentía, empezó a transformarse.
Humberto ha contado cómo se dio cuenta de que estaba enamorado de ella: “Ella tenía a su pareja, yo tenía la mía. En un momento dado ella dejó de tener pareja, y como medio año después yo dejé de tener la mía, y dije: ’Pues...’, y ahí el destino cambió mi vida. Cuando ella ya dejó de estar con su pareja, fue cuando yo empecé a sentirme inquieto. Ya éramos muy amigos, y eso era muy importante. Ella conocía muchas cosas de mí, y yo de ella”.
Si bien su amistad con Christian era de suma importancia, sus sentimientos empezaron a tener más relevancia, así que el actor se sinceró con él mismo y aceptó que quería tener algo más con ella. No obstante, su primer beso tan soñado llegó de la manera menos tradicional: durante el rodaje de una telenovela.
Finalmente, la pareja formalizó su noviazgo. Iniciaron una relación que, aunque ellos no lo sabían, estaba destinada a durar toda la vida. Mientras eran novios, ambos se fueron a vivir juntos, y el deseo de tener hijos empezó a nacer; no obstante, Christian se rehusaba a traerlos al mundo sin haberse casado.
El deseo de Humberto de formar una familia con ella era tan grande que un día, en el periférico de la Ciudad de México, decidió pedirle oficialmente que fuese su esposa. Ambos iban en carros distintos y él se lo propuso a toda voz desde el suyo. Ella, por su parte, le pidió detener el auto para que lo pidiera de un modo más formal.
El siguiente paso en su historia de amor fue su boda, la cual se llevó a cabo el 3 de febrero de 1986, en la Iglesia de San Agustín, en Polanco. El evento conmocionó a la población, dado que se trataba de una de las parejas más admiradas del medio. Además, esta era la unión en la vida real de los protagonistas de la telenovela Pura sangre, la cual aún se estaba grabando en ese momento.
En una entrevista, la misma Christian recordó con dulzura ese detalle de su público: “Nadie se imaginó que iba a pasar eso. Íbamos llegando a la iglesia y yo dije: ’Justo pasó algo, mira, hay policías, patrullas, ambulancias. ¿Qué habrá pasado?’. Nos fuimos acercando y empezamos a ver ese mundo de gente que estaba acompañándonos en realidad”.
A finales de 1986, nació su primer hijo, Sebastián, y siete años más tarde, la pareja trajo al mundo a Emiliano, con quien terminaron de completar su familia. Si bien ser padres no es un rol sencillo, los actores supieron combinar su vida familiar con la profesional, de manera que siguieron trabajando a medida que criaban a sus hijos.
Su matrimonio fue un ejemplo dentro del medio artístico mexicano por su solidez, respeto y unión. Durante años se profesaron un amor profundo y verdadero que no se apagaba por nada ni nadie. Sin embargo, la vida les tenía preparada una prueba muy fuerte, la única capaz de desafiar su historia de amor.
En 2017 empezaron a circular rumores sobre un posible problema de salud que estaría afectando a la actriz. En aquel entonces, tanto ella como su familia fueron bastante herméticos sobre la situación y afirmaron que tenía una pequeña dolencia, pero que no era nada grave. Sin embargo, los medios no se conformaron: publicaron testimonios de allegados que declaraban que su enfermedad era degenerativa y tenía que ver con las articulaciones.
Durante los siguientes años, Christian se dejó ver muy poco ante las cámaras, y no asistía a los eventos sociales. Su comportamiento parecía confirmar las suposiciones de la prensa, pero sus labios seguían tan sellados como siempre. Humberto, por su parte, casi siempre evadía el tema en las entrevistas, y si llegaba a tocarlo, minimizaba la gravedad del asunto.
La muerte de la actriz tomó al mundo por sorpresa. En medio del impacto, los medios difundieron la noticia del fallecimiento de Christian luego de que la familia la diese a conocer a través de un comunicado el 1 de marzo de 2019. Tanto el padre como los hijos dejaron claro que no hablarían de las causas que habían desencadenado la pérdida de la actriz.
Humberto informó la noticia con estas palabras: “Queremos compartir con ustedes una pena muy grande para esta familia: Christian Bach murió el 26 de febrero de este año debido a un paro respiratorio. (...) Christian fue una gran actriz y una mujer ejemplar; una gran madre y una esposa que llenó la vida de su familia de amor, valentía, coraje y grandes deseos de vivir plenamente, de una manera congruente con sus ideas y sus anhelos. Hoy le decimos hasta pronto con un gran dolor en nuestros corazones. Hoy tenemos que seguir sus pasos y seguir adelante sin ella, sin su presencia física, convencidos de que en ningún momento de nuestras vidas dejaremos de amarla y tenerla en nuestra mente. Que este comunicado sirva para honrar y despedir a una gran mujer. Una mujer entregada a sus hijos, a su familia y a su público que tanto amó y respetó; del mismo modo que sabemos que los admiradores de Christian la amaron y respetaron por ser la mujer que es, fue y será siempre en cada uno de sus corazones. Con cariño, Familia Zurita-Bach”.
Luego de su muerte, su esposo se ha dedicado a mantener su recuerdo vivo y a expresar el dolor que siente por haberla perdido. En una entrevista reciente, comentó: “Pienso: ’¿Por qué se tenía que morir Christian? Tan joven, tan bella’. Y puedo hacer una metáfora de eso: a lo mejor Dios es ese gran cazador que está esperando, y nosotros somos sus sabuesos. A él no le importa la presa, sino la angustiosa búsqueda, y luego te suelta. Pero es un jardinero, y de su jardín, egoístamente, cortó la mejor flor; se llevó a la mejor flor que tenía. (...) Se llevó lo más lindo; no la dejó envejecer, no dejó que esa flor se marchitara, y eso está padre”.
Asimismo, Humberto ha dejado claro que, para él, el cuerpo es solo un vehículo, por lo que Christian sigue con él, aunque ya no pueda verla: “Christian está en mi corazón, y ahí va a estar siempre. Es el lugar que ella ocupa. Ahí está, está tatuada, más que tatuada”, dijo. Además, afirmó que, si bien no está entre sus planes volver a enamorarse, tampoco está totalmente cerrado a esa posibilidad, aunque ya no sería un amor igual: “Tendría que entender esa otra persona que nuestro amor sería diferente. Yo ya tuve hijos y yo ya conocí el amor”.
Sin lugar a dudas, este es un amor que ha superado todo. Y en tu caso, ¿cuál es la historia de amor más grande y bonita que hayas vivido o conocido?