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La desgarradora historia de Sabine Moussier, una vida construida sobre una mentira

Sabine Moussier, una de las mejores villanas de las novelas desde 1996, escondió durante un buen tiempo su doloroso pasado. No fue hace mucho cuando la antagonista de La Madrastra abrió su corazón para revelar cómo su vida se fue abajo al enterarse de todas las mentiras de su madre sobre su nacimiento, y sobre qué fue del padre que ella creía muerto.

Una de las figuras más queridas de la televisión mexicana es Sabine Moussier, reconocida por su destacada interpretación de villanas. En 2019, la actriz compartió su impactante historia familiar: descubrió que su acta de nacimiento era falsa y que su padre no era alemán como se creía.

Nacida el 12 de julio de 1966 en Leverkusen, Renania del Norte-Westfalia, Alemania Occidental, Sabine se vio confrontada con esta verdad cuando tenía 30 años, en un momento crucial de su naciente carrera actoral. Este descubrimiento sacudió su vida y la llevó a replantearse su identidad y su camino en la búsqueda de respuestas.

En una entrevista en el 2019, la actriz relató cómo su madre quedó embarazada y fue enviada a Alemania debido a que en aquel tiempo, en México, no era bien visto tener un embarazo. Así fue como nació en tierras alemanas. Sin embargo, al regresar, se emitió un acta de nacimiento falsa en la que la registraron como Diana Sabine Kronz Moussier.

Sabine, quien se enteró de esta verdad cuando ya tenía más de treinta años, reveló que la confesión de su madre desencadenó en ella la necesidad de buscar a su padre, pues, aunque su madre le había asegurado que perdieron rastro de él en la caída del muro de Berlín, realmente no sabía qué había sucedido con él, solo le habían dicho que era un maestro de alemán.

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Además, durante la entrevista, Moussier mencionó que había buscado la ayuda de Talina Fernández, quien en ese entonces conducía el programa ¿Qué crees?, un espacio dedicado a la búsqueda y reunión de familias separadas. Fue gracias a eso que su madre finalmente le confesó su verdadero origen: efectivamente, había nacido en Alemania, pero su padre era de nacionalidad mexicana.

Dos años después, en otra entrevista, Moussier recibió una noticia que la dejó en shock: “Tu papá no se llama Joan Kronz, no eres Diana Sabine Kronz Moussier, tu acta de nacimiento es falsa, todo era falso”, le confesaron. Asimismo, le revelaron que su verdadero padre, Francisco Javier Fernández, vivía en Lindavista, aunque su paradero actual era desconocido. Sabine, experimentó sentimientos encontrados hacia su madre, su familia y su padre adoptivo, Rafael Rivero.

Tiempo después, la actriz compartió el doloroso hecho de que su padre adoptivo falleció tras una batalla contra el Alzheimer, con lo que ella se sentía molesta y triste porque se había alejado de él por las anteriores declaraciones. La partida de su padre adoptivo fue un golpe devastador y ella tuvo que enfrentar el duelo y la complejidad de sus emociones en medio de la revelación de su verdadera identidad.

Durante esa misma entrevista, Sabine Moussier expresó que finalmente había logrado perdonar a su madre y reunirse con su padre biológico. Con sinceridad y emoción, compartió: “No tengo nada en su contra, es un ser humano maravilloso, y su familia me ha abrazado y apoyado de una manera indescriptible. Mi nombre es Diana Sabine Moussier, tuve un padre por el que nací y que es una persona encantadora, aunque casi no lo vea. Por otro lado, tuve un padre que me ayudó a crecer y salir adelante, y siempre estará en mi corazón”.

Con lágrimas en los ojos, Sabine agregó: “Después de todo el resentimiento que pude haber tenido y de todas las dificultades, reconozco que tengo una madre maravillosa. La respeto y admiro profundamente, ya que me ha convertido en una gran persona”.

Hoy en día, a sus 56 años, la talentosa actriz continúa triunfando en el mundo de las telenovelas. Además, es madre de Camila y Paulo Peralta, fruto de su matrimonio de seis años con Jorge Peralta, del cual se divorció en 2008.

A pesar de descubrir una verdad impactante sobre su origen y enfrentar situaciones difíciles con sus padres biológicos y adoptivos, Sabine ha demostrado una gran valentía al perdonar y sanar las heridas del pasado. Su historia es un recordatorio de que el perdón no solo libera a quienes nos han lastimado, sino que también nos brinda la oportunidad de sanar y crecer como seres humanos.

Por desgracia, esta gran actriz no ha sido la única famosa a quien las mentiras le cobraron una factura enorme, Jack Nicholson, quien encarno el protagonista de El resplandor, se enteró a los 37 años quién fue realmente su mamá biológica, no te pierdas su historia.

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