7 Aceites naturales capaces de hacer maravillas contra las arrugas
El paso del tiempo es inevitable, y aunque todas quisiéramos conservar intacta la piel de porcelana de nuestra adolescencia, las líneas finas de expresión y las arrugas comenzarán a aparecer entre los 35 y 50 años. Para combatirlas hay infinidad de productos como cremas, o tratamientos estéticos como el bótox, pero nada mejor que recurrir a lo natural.
En Bella y Genial sabemos que la madre naturaleza tiene un remedio para todo, por eso nos dimos a la tarea de buscar los 7 aceites naturales que ayudan a mantener la piel suave y flexible.
1. Aceite de oliva
Sabemos que el aceite de oliva es un ingrediente italiano esencial para la pasta, la pizza y el aderezo de ensaladas. Pero las aceitunas son ricas en vitaminas hidratantes así como en antioxidantes, lo que las convierte en un gran candidato para reducir las arrugas y las líneas finas de expresión.
Tan solo sumerge una bolita de algodón en:
- aceite de oliva extra virgen;
- unas gotas de jugo de limón fresco (opcional).
Aplícate la bolita de algodón en la cara antes de irte a dormir.
2. Aceite de coco
El aceite de coco no solo se utiliza para fortalecer el cabello, también es excelente para la piel. Además de reducir la inflamación, hidratar y ayudar a sanar las heridas más rápido, los ácidos grasos del aceite de coco (caprílico y láurico) protegen la piel y tienen muchos antioxidantes, lo que beneficia considerablemente a la delicada zona del rostro.
Añádelo a tu rutina diaria mezclando:
- tu crema hidratante;
- unas gotas de aceite de coco.
Aplica cada mañana como de costumbre, aunque es importante considerar que se trata de un aceite comedogénico, es decir, no es recomendable para personas con cutis graso o tendencia al acné.
3. Aceite de lavanda
El olor a la lavanda promueve la relajación total, y el mismo efecto también se observa en las líneas finas y las arrugas. Con altos niveles de antioxidantes, propiedades antimicrobianas y antibacterianas, el aceite esencial de lavanda hace maravillas contra el acné y las arrugas.
En un frasco o tazón pequeño, combina:
- unas gotas de aceite esencial de lavanda pura;
- aceite de coco extra virgen (o cualquier otro aceite portador que prefieras).
Agita o mueve suavemente el frasco y agrégalo a tu rutina de cuidado de la piel.
4. Aceite de aguacate
El aceite de aguacate es rico en ácidos grasos, grasas omega y vitamina A —nutrientes que la piel absorbe. No solo es un excelente humectante, también contiene minerales y antioxidantes que protegen tu rostro de los rayos ultravioleta del sol, que son una de las principales causas de la formación de arrugas.
Para usar aceite de aguacate, combina:
- 2 cucharadas de aceite de aguacate;
- 3 a 4 gotas de aceite esencial floral, como rosa o lavanda.
Colócalos en un frasco de 1 oz o 30 ml. Agita suavemente el contenido para mezclarlos antes de aplicarlos en tu cara.
5. Aceite de limón
El aceite de limón se usa para tratar el acné y los problemas de hongos. También es un aceite utilizado en muchos productos antienvejecimiento debido a las altas propiedades antioxidantes y antimicrobianas que contiene. Por su alta concentración, este aceite esencial de limón primero debe diluirse en un aceite portador, como el de semilla de uva, aceite de coco o aceite de oliva. Los estudios también han encontrado que los aceites cítricos reaccionan duramente en la piel cuando se expone al sol, por lo que es mejor usarlos de noche.
En una botella de 50 ml, mezcla:
- 50 ml de aceite portador (recomendamos aceite de oliva extra virgen o aceite de semilla de uva);
- 3 a 5 gotas de aceite de limón.
Agita suavemente la botella antes de usar su contenido en tu piel. Para obtener mejores resultados, úsalo solo de noche.
6. Aceite de semilla de uva
Este aceite está hecho de semillas de uvas prensadas, generalmente es un subproducto de la vinificación. Las semillas son ricas en vitamina E y grasas poliinsaturadas, por lo que es un aceite nutritivo para que tu piel lo absorba.
Puedes aplicar aceite de semilla de uva directamente sobre tu piel y masajear hasta que se absorba.
7. Aceite de semilla de zanahoria
El aceite de semilla de zanahoria es un aceite esencial obtenido de semillas de zanahorias prensadas en frío. El aceite es rico en propiedades antiinflamatorias y antimicrobianas; además, se ha encontrado que tiene propiedades antienvejecimiento. Con altos niveles de antioxidantes, el aceite también hidrata y rejuvenece. Al igual que otros aceites esenciales, el aceite de semilla de zanahoria primero debe diluirse en un aceite portador antes de frotarlo sobre la piel.
Para usar aceite de zanahoria, combina:
- 2 cucharaditas de aceite portador, como aceite de almendras o aguacate;
- 2 gotas de aceite de semilla de zanahoria.
Usa tus dedos o una almohadilla de algodón para aplicar el aceite en tu piel.
Es importante tener en cuenta que la piel de cada persona reacciona de manera diferente a cada aceite, por lo que es mejor hacer una prueba de sensibilidad antes de aplicar el aceite a cualquier parte de la piel.
¿Qué rutina de cuidado te ha dado mejores resultados en la piel de tu rostro?