9 Tips para diferenciar la ropa de calidad de la que no lo es
¿Has pensado alguna vez que tu ropa es una inversión importante? Por eso, es fundamental escoger bien las prendas que compramos. Si eliges prendas de buena calidad, podrás usarlas por mucho más tiempo y ahorrar dinero a largo plazo. Pero, ¿cómo diferenciar entre ropa de calidad y la que no lo es? Aquí te dejamos algunos consejos para que no gastes en cosas que se deteriorarán rápidamente en tu clóset.
1. Usa un pañuelo húmedo
La ropa con un teñido deficiente puede arruinar no solo otras prendas, sino también tu piel. Los jeans son especialmente propensos a desteñirse, y basta sudar un poco o quedar atrapado en la lluvia para que tus piernas parezcan de pitufo. Para evitar esto, descubre de antemano si la tela se desteñirá o no. Puedes hacerlo tomando un pañuelo blanco húmedo o una servilleta humedecida y frotando la tela. Si el pañuelo se colorea, la prenda se desteñirá.
2. Mira si los bolsillos vienen cerrados
Antes de enviar una chaqueta o abrigo a la tienda, un fabricante de buena fe se preocupa por coser los bolsillos laterales para asegurarse de que el producto no pierda su forma. Los bolsillos cocidos no se estiran ni se abultan debido a las varias veces que la prenda es probada. La abertura en la parte inferior de la espalda de una chaqueta o abrigo también se cose por la misma razón. Si después de comprar la prenda no necesitas abrir los bolsillos, debes descoser esta abertura sin falta.
3. Huele la tela
¿Has notado que algunas tiendas, especialmente las tiendas de segunda mano, tienen un olor característico? Esto se debe a la presencia de formaldehído, un gas orgánico con un olor fuerte y desagradable que se utiliza para desinfectar la ropa y prevenir el moho. Sin embargo, cantidades excesivas de formaldehído pueden causar alergias y otros problemas de salud. No obstante, no es necesario entrar en pánico, ya que el gas desaparece después de varios lavados.
Es importante que, además de tocar y probar la ropa, también se huela antes de comprarla. Los artículos de calidad no deben tener un olor fuerte, por lo general huelen a algo neutro o a un perfume suave.
4. Checa la calidad de las costuras
Una vez que hayas evaluado la tela mediante el tacto, la transparencia y el olor, es momento de probarse la prenda. Si las perneras de los pantalones o jeans están chuecas o la costura debajo de la rodilla es irregular, significa que tienes frente a ti una prenda de mala calidad. Esto se debe a un corte o montaje incorrecto del producto. Además de ser incómodo, visualmente dobla las piernas y les da un volumen extra. Sin embargo, este defecto puede ser arreglado por un costurero.
Aquí (uno) te compartimos algunos trucos para pueden ayudarte a la hora de probarte ropa. También algunos consejos que te ayudarán a escoger prendas que resalten tus atributos y algunos otros para que siempre te veas con estilo y a la moda.
5. Prende fuego a un hilo o trozo de tela
En ocasiones, los fabricantes de ropa pueden ocultar la verdadera composición de sus productos, y en lugar de 100% algodón, pueden utilizar una mezcla de algodón y poliéster. Afortunadamente, no es necesario acudir a un laboratorio para determinar la composición del tejido, se puede hacer en casa de forma sencilla.
Para hacerlo, se puede tomar un trozo de tela que vino con el botón de repuesto, o sacar con cuidado un hilo de la prenda y prenderle fuego. Las telas de lino y algodón se queman de forma similar debido a su alto porcentaje de celulosa. Cuando se queman, suelen desprender un olor a papel quemado y las fibras se queman rápidamente, dejando una pequeña cantidad de humo blanco.
- La viscosa, que está hecha de madera natural, se quema rápidamente y también desprende un olor a papel quemado, dejando cenizas y humo gris.
- La lana y la seda, por otro lado, huelen a pelo o plumas quemadas. Al arder, sus fibras se enrollan y se apagan lentamente.
- El acrílico se quema desprendiendo una amarilla brillante con pequeños destellos. Después de enfriarse, se forma una bola densa.
- Las fibras sintéticas de acetato arden con una llama amarilla que desprende un olor a vinagre marcado.
- El tereftalato artificial se quema de un color amarillo pálido y desprende hollín negro. Al enfriarse, se forma una densa bola negra.
Es importante recordar que no se debe realizar esta prueba dentro de una tienda para evitar dañar la prenda o causar un incendio.
6. Mira la transparencia de la tela
Cuando seleccionas prendas, es importante que te fijes en su densidad y peso. En la industria de la confección, los tecnólogos utilizan el término “densidad de superficie”, que se refiere a la cantidad de gramos que pesa un metro cuadrado de tela. Cuanto mayor sea este indicador, más costosa será la tela.
No es necesario contar con herramientas especiales para medir la densidad de una tela. Puedes evaluarla sosteniendo el artículo en tu mano. Si la tela es demasiado delgada y suelta, se rasgará y estirará rápidamente en las zonas en que la figura sobresale. Otra forma de evaluar la calidad es mirando la prenda a trasluz. Si la transparencia es desigual, es un signo de mala calidad en el tejido.
Hay algunos otros detalles que pueden hacer que la ropa o los accesorios se vean baratos, como los apliques o cuentas, o costuras de diferente color a la prenda. Siempre fíjate en ellos antes de decidir comprar algo. Y si ya cuentas con algunas prendas que no son de tan buena calidad o pasadas de moda, no te preocupes, existen algunos trucos para sacarles el mayor provecho y que luzcan como si fueran de millones.
7. Observa que el patrón de los forros coincida
En las prendas bien elaboradas, el patrón de la tela en las costuras debe coincidir. Si no lo hace, el fabricante probablemente decidió ahorrar costos. Esto se aplica no solo a la parte exterior del producto, sino también al forro.
Es importante que el forro de una prenda tenga la combinación adecuada de densidad y suavidad para que se ajuste bien. Si la prenda está hecha de telas elásticas como el jersey, guipur o terciopelo, el forro también debe ser elástico. Por otro lado, si la prenda está hecha de telas no elásticas como la lana o el algodón, entonces el forro debe ser acorde con esto.
8. Comprueba la calidad de los accesorios de la prenda
Para ahorrar dinero, los fabricantes pueden usar accesorios de mala calidad en la ropa, como botones de plástico o de metal teñido, cremalleras de plástico y hilos sueltos. Una prenda bien confeccionada debe tener la cremallera cerrada en la tienda, y en pantalones, faldas y vestidos, se suele ocultar o cubrir con una solapa protectora. Los bucles de los botones deben estar bien trabajados y cortados, y el kit debe incluir un botón de repuesto.
Si se opta por productos con botones de plástico, es importante que no sean demasiado delgados y que el tono del botón combine con la tela
9. Frota la tela
Los pelotitas de tela afectan negativamente la apariencia de la tela y generalmente se forman en materiales sintéticos, fibras cortas, mezclas de tejidos sintéticos y naturales y prendas de punto.
Es importante tener en cuenta la composición del material. Cuanto más sintético sea el tejido, por ejemplo: poliéster, elastano, acrílico, poliamida, nailon, mayor será la probabilidad de que se formen bolitas. En la ropa de lana, estas pueden aparecer rápidamente, pero a menudo desaparecen con el tiempo. Para determinar si se formarán o no, se puede frotar intensamente un trozo de tela entre sí: un material de baja calidad comenzará a llenarse de bolitas inmediatamente.