Familia

En muchas parejas el deseo de dar el siguiente paso, que puede ser casarse o vivir en unión libre, es la forma de hacer realidad el sueño de formar una familia, que se conoce como biparental. Pero en otros casos, hay personas que deciden criar a sus hijos por cuenta propia, ya sea por elección o porque las circunstancias los llevaron a tomar esa decisión, convirtiéndose así en una familia monoparental.

Convertirse en madre es una de las etapas más hermosas y desafiantes para una mujer. Ya sea que se trate del primer hijo o de un segundo o tercer embarazo, es un acontecimiento importante, digno de ser compartido con nuestros seres queridos. Ahora bien, cuando las famosas descubren la llegada de un bebé, no solo lo comparten con los más cercanos, también deciden contárselo al mundo de las formas más inesperadas.

Las pruebas de amor de un padre hacia sus niños no tienen límites, desde comprarte tu helado favorito hasta pasar tiempo juntos haciendo algo que a ambos les gusta. El más mínimo detalle puede ser enorme por todo el cariño que hay detrás, por eso nunca hay que dejar de tenerlos sin importar que los hijos crezcan pues la relación padre-hijo es algo que se alimenta todos los días y jamás se desvanece.

No es ningún secreto que los hijos son el gran talón de Aquiles para los padres, sobre todo si se trata de sus pequeñas niñas. Ya sean solteros o casados, los papás tienden a ser muy protectores con ellas, pero también muy juguetones, cariñosos y consentidores a más no poder con tal de verlas felices.

Tener el apoyo y cariño de ambos padres desde la infancia impacta de manera muy positiva en el crecimiento de los pequeños. Antes, la crianza solía ser más estricta y hasta un poco fría, pero los tiempos han cambiado. Ahora incluso los papás cumplen un rol que se consideraba únicamente de las mamás; participan, se involucran emocionalmente y comparten la responsabilidad.

Hay quienes creen que tener un segundo hijo será pan comido después de haber tenido al primero: ya sabes las cosas básicas, ya no eres primeriza, adquiriste experiencia... ¿cuál puede ser el problema? Pero la realidad es que el segundo hijo está lleno de nuevos retos, por lo que es normal que las próximas mamás se enfrenten a miedos e incertidumbres al respecto. Pero no estás sola, todas hemos pasado por ahí y, finalmente, salimos victoriosas.

Educar a un hijo no es para nada sencillo, y quizá lo más difícil es encontrar el equilibrio entre autoridad y libertad, entre orden y soltura. Lo que es seguro es que todas queremos que nuestros hijos sean el día de mañana adultos responsables, independientes y felices; para esto, es esencial que aprendan a tomar decisiones por sí mismos y a confiar en ellos. Pero, más allá de la teoría ¿cómo les enseñamos eso en el día a día?

Al igual que la maternidad, la paternidad es una experiencia única e inigualable que transforma la vida de una persona para siempre, pues conlleva de gran responsabilidad tanto económica como emocional para acompañar y educar a los niños en cada una de sus etapas. Si bien hay muchas ventajas de ser padres jóvenes, hoy en día algunas personas deciden hacerlo a una edad más avanzada. Un ejemplo de ello es el cantante británico Elton John, quien se convirtió en padre por primera vez a los 63 años.

Decirle que no a nuestros hijos a veces es difícil, pero también necesario. Seguramente has pasado por alguna situación en el supermercado, tienda o en la calle donde el berrinche se hizo inminente, y precisamente esas situaciones son las que querríamos evitar, ¿pero cómo?

Encontrar el amor puede ser un proceso complejo en muchas ocasiones. No solo hablamos del amor de una pareja, sino también del propio. Aceptarse, valorarse, marcar nuestros límites y tener en claro lo que queremos son cuestiones fundamentales para estar bien con una misma y, como consecuencia, la persona indicada llegará sola.

Cuando se trata de la educación de los hijos, siempre habrá miles de opiniones y enfoques, desde los más conservadores hasta los que son tan progresistas que hasta suenan a broma. Así como nosotras, las famosas también lidian con la dificultad de determinar qué cauce le van a dar a la educación de sus criaturas. A veces, sus decisiones resultan algo polémicas y sorprenden a todos a su alrededor.

Bien dicen que madre no es solo la que da a luz, también es la que se hace cargo de ti y te educa. Como tu abuelita, tu tía o alguien más que te haya brindado su amor sin importar si compartes su sangre o no. La actriz Sandra Bullock, es precisamente un ejemplo de que cuando se desea la maternidad, ni las distinciones ni las complicaciones son un problema.

Dicen que es muy fácil hablar cuando no estás viviendo la situación, y en pocos rubros esto es tan cierto como en la maternidad. Antes de tener hijos, o incluso estando todavía embarazadas, afirmamos que haremos tal y cual cosa, que “nunca” permitiremos tal otra o que educaremos a nuestros hijos de cierta manera. Pero cuando se impone la realidad de tener a ese pequeño ser en nuestros brazos, fácilmente a las palabras se las puede llevar el viento.

Alguna vez en la vida nos han mencionado el parecido que tenemos con nuestros padres. Probablemente, nosotras también lo hayamos hecho cuando nos han presentado a una niña o a un niño. En momentos así sentimos el impulso de encontrar a cuál de sus padres se parece más. Tampoco podemos evitarlo con los hijos de las celebridades que admiramos, los cuales se parecen tanto a sus padres que nos recuerdan a ellos de jóvenes.

La hemos visto crecer, desarrollarse como artista y esta vez es el turno de conocer la admirable historia detrás de la cantante que ha tocado el corazón de miles con su música. Ella es Adele, la cantautora que logró sobresalir gracias a su inigualable voz y talento, demostrándole al mundo que no se necesita tener una figura esbelta y “perfecta” para ser exitosa.

Por diferentes razones, la edad promedio en que las mujeres se convierten en madres está aumentando constantemente en todo el mundo. Las celebridades son un ejemplo de esto, y una de ellas es la actriz Helena Bonham Carter, quien se convirtió en madre por segunda vez a los 41 años.

Desde pequeñas hemos crecido junto a varios personajes de la televisión, guardando así una relación de nostalgia y cariño con ellos por todas las veces en las que nos acompañaron a través de una pantalla.

Convertirse en padre es una de las cosas más felices y, a la vez, complicadas de este mundo, sobre todo si se es padre soltero. La paternidad puede volverse difícil si es una tarea de una sola persona, y más aún cuando se enfrenta la pérdida de la pareja. Liam Neeson, además de ser un gran actor que siempre salva el día, tuvo que enfrentarse a la muerte de su esposa y convertirse en un papá ejemplar.

Además de ser uno de los actores más reconocidos de Hollywood, Will Smith es el amoroso padre de tres hijos: Trey, Jaden y Willow Smith. Con respecto a la crianza de los niños, Will reconoce que ha tenido algunos desaciertos por influencia de su propio padre, que fue muy duro y estricto con él. Sin embargo, aprendió de sus errores y logró convertirse en la figura paterna que nunca tuvo. Y así cumplió su objetivo de formar una familia.

Aunque todas las personas crecemos de diferente manera, es verdad que compartimos algunas características dentro de cada una de nuestras etapas de desarrollo, por ejemplo, la de lenguaje. Por eso es importante poner atención a esos indicadores, sobre todo cuando se trata de la primera infancia, porque así podremos saber si los niños están creciendo dentro de los parámetros considerados normales. Por ejemplo, a los 6 meses, es común que los bebés empiecen a balbucear, mientras que a los 2 años ya deberían referirse a sí mismos por su nombre.