Estilo

Sabemos que cada una de nosotras tiene sus propios encantos, y nos gusta destacarlos a la hora de vestirnos. A veces, por las prisas de la vida, no elegimos el conjunto ideal para resaltar nuestros atributos favoritos. Pero no debes preocuparte, aquí te dejamos algunos consejitos que puedes usar a tu favor para lucirte con los básicos de tu clóset en cuestión de minutos.

Usar la misma ropa una y otra vez puede ser un tanto aburrido. Pero hay muchas maneras de renovarse que no implican gastar en un nuevo guardarropa. Las chicas de este artículo lo demostraron, al darle un giro de 360° a prendas que ya tenían en su armario. Camisas convertidas en vestidos o faldas transformadas en conjuntos. No se necesita de tanto dinero para crear algo nuevo.

Si bien lo estético no es lo más importante en una persona, sí se puede decir que habla mucho de ella; nuestro estilo y gustos se ven reflejados en el atuendo que usamos día a día. ¿Te consideras clásica o prefieres las estampas y los colores fuertes? ¿Te agrada usar accesorios? Cada prenda y cómo la combines dirá mucho de ti frente a los otros.

En un abrir y cerrar de ojos la moda cambia. Lo que ayer estaba en tendencia, hoy, puede que ya no se use más. Pero también cabe la posibilidad de que lo que se consideraba como pasado de moda vuelva a estarlo en la actualidad o que se reinvente. Así que no te deshagas de tus joyas viejitas porque, muy probablemente, puedas volver a lucirlas pero con un toque mucho más moderno.

Somos las primeras en admitir que cualquier prenda de moda puede usarse con el grado adecuado de confianza y un estilo personal. Sin embargo, las tendencias tienen un ciclo de vida constante y los estilistas recomiendan, al menos por un tiempo, deshacerte —o guardar en el clóset— unas cuantas prendas y accesorios que tuvieron su furor en años pasados y usarlas ahora podrían arruinar tu atuendo o hacerte ver anticuada.

El mundo de la moda cambia constantemente y lo que ayer se veía bien, hoy ya no se usa. La elección de los colores, los accesorios, o si la ropa es más reveladora o menos, se va modificando según la época. A veces miramos al pasado y nos resulta sorprendente que vistiéramos y nos gustaran tanto ciertas prendas.

A la mayoría de nosotras nos gusta contar con un guardarropa lleno, para armar todos los atuendos que tenemos en mente. Poco a poco vamos añadiendo prendas que creemos nos harán lucir espectaculares. Pero en ocasiones, la ropa que seleccionamos no es la mejor para resaltar nuestra figura, y estas pueden llegar a dar la ilusión de tener kilos adicionales.

En cuestiones de moda, como en muchos otros aspectos, la sociedad ha evolucionado y las reglas ya no son tan estrictas e inflexibles. Antes, había ciertos códigos de estilo y vestimenta que se creían casi sagrados; pero hoy en día la moda se ha vuelto un espacio más para jugar, experimentar y divertirte. Hoy se sabe que, más allá de seguir preceptos, lo esencial es la actitud que proyectas y sentirte cómoda contigo misma.

A principios de los 2000, el mundo atravesaba por el éxtasis del milenio que empezaba. Los ideales de un nuevo comienzo en la humanidad, de la mano de las promesas de la tecnología, hicieron que esos años fueran de lo más peculiares en cuanto a moda y costumbres se refiere. Hoy, 21 años después, muchos aspectos han cambiado, y miramos hacia atrás con nostalgia, pero también con deseos de no haber normalizado ciertas cosas que en ese momento eran “la onda”.

Encontrar la prenda de vestir perfecta que se amolde a nuestras curvitas, talla y, sobre todo, a nuestro gusto suele ser toda una aventura. Por eso es por lo que todas tenemos nuestra remera o playera favorita, la cual no dejamos de usar, incluso si ya ha dejado de estar a la moda. La cuestión es que, aunque estas piezas estén entre nuestras preferidas, eso no siempre significa que nos queden “bien”.

No solo admiramos a nuestros actores favoritos por su talento e inolvidables personajes en la pantalla grande, también solemos observar cada detalle de sus looks. Es probable que cuando eras niña miraste alguna serie o película, y querías lucir igual que tu actriz preferida. Lo mismo sucede en la adultez; muchas actrices deslumbran a sus seguidores con su estilo e imponen una nueva tendencia. Si nos enfocamos en el calzado, existen varios modelos que fueron un símbolo en el mundo de la moda, ¿los repasamos?

Todas quisiéramos que el dinero fuera como la moda que siempre vuelve. Aunque no podamos ser millonarias con billetes infinitos, sí podemos ahorrar en ropa si sabemos qué cosas es mejor conservar y cuáles definitivamente no.

Bien dicen que los ojos son las ventanas del alma, y la diferencia entre lucir una mirada felina o unos ojos de muñeca está en los pequeños detalles. ¿Te has dado cuenta de que, muchas veces, con cambiar simplemente el color de las sombras se logra un look muy diferente?

“Guau, ¡¿cómo logran verse tan perfectas?!”, es una pregunta que nos solemos hacer cuando vemos a las celebridades en eventos muy importantes luciendo regias. Aunque nos gustaría vernos como ellas, el trabajo detrás de tales looks es mucho. Pero que esto no te asuste, porque hay una que otra cosita pequeña que podemos aprender de ellas y aplicarlas en nosotras para lucir impecables.

Un atuendo perfecto puede quedar eclipsado por un elegir de manera incorrecta los zapatos. Existen ciertas recomendaciones, respaldadas por estilistas, a las que vale la pena darles una revisada. Quizá estamos pasando por alto ciertos detalles o tal vez, sin saberlo, ya aplicamos algunas.

Alguna vez, todas nos preguntamos cómo hacen las celebridades para verse siempre bellas. Y aunque nosotras lo intentemos todo, terminamos desarregladas al final de la fiesta. Pues ha llegado la hora de probar nuevos trucos infalibles que la mismísima realeza ha usado por años para lucir impecable y aquí te los revelaremos.

Uno de los sentimientos más placenteros es cuando cambias tu look y sientes que puedes contra el mundo. Esos pequeños detalles nos pueden levantar el ánimo en muchas ocasiones. A veces pasamos por momentos complejos y necesitamos un cambio radical, y comenzar por nuestro cabello puede significar un buen comienzo.

Hay que admitirlo: nadie, por más que lo intente, puede lucir perfecto. Y es que cuando se trata de vestirse, maquillarse, arreglarse el cabello, etc., las posibilidades de terminar con un resultado completamente distinto al que queríamos son grandes. Incluso cuando creemos que nos vemos divinas, puede haber pequeños detalles que no notamos, pero que los demás distinguen fácilmente, los cuales cambian su percepción sobre nosotras.

Hay que admitirlo: nadie, por más que lo intente, puede lucir perfecto. Y es que cuando se trata de vestirse, maquillarse, arreglarse el cabello, etc., las posibilidades de terminar con un resultado completamente distinto al que queríamos son grandes. Incluso cuando creemos que nos vemos divinas, puede haber pequeños detalles que no notamos, pero que los demás distinguen fácilmente, los cuales cambian su percepción sobre nosotras.

Así como las cejas, la apariencia de nuestro cabello puede cambiar drásticamente la manera en como nos vemos para bien o para mal. El chiste es buscar el estilo que nos ayude a resaltar nuestra belleza. A veces nos va bien corto, y otras es mejor dejarlo crecer, como estos hombres que se arriesgaron al no cortarlo por años y ahora lucen irresistiblemente guapos.